
Actuar, sí, pero para fingir, disimular, disfrazar… ¡qué se yo! Es ahora más que nunca que necesito una nariz, mi pequeña máscara, mi gran cómplice. Gracias a ella he dibujado sonrisas en mi rostro mientras mi alma lloraba, he dado abrazos cuando mi corazón insultaba, he besado con pasión a quien no amo… ¡te hecho de menos! Sí, a tí mi motivo de risa y de jolgorio a los espectadores.
Te necesito tanto en estos momentos… me es tan urgente liberarme y olvidar… No lo sabes, pero llegó la hora de que regreses a mi, es la excusa perfecta para partir a tu encuentro si es necesario.
Te abandoné para empezar de nuevo, por la necesidad que sentía de cambiar de horizontes… no estás, te perdí… te buscaré y de nuevo serás mi compañera de viaje hacia otras dimensiones, hacia otras vidas, hacia sueños ajenos.
Hoy quiero estar contigo, quiero que me lleves de la mano a huir como una cobarde que perdió la guerra y que está tan lastimada que decir que vive ya es mucho. Hoy quiero recuperar mis sueños, mis ilusiones, mis deseos… a ti nariz que tanto me has ayudado, te necesito ahora para buscar en nuestras efímeras realidades lo que tanto anhelamos: la felicidad.
2 comentarios:
me encanto.... me encanto.....
ese paralelo del calun recurriendo a esa rutina de vida..... k genial es.... Y el fracaso de huir como un soldado de la guerra. de verdad glo escribes demasiado bien.....me has llegado al alma y no te preocupes aunk nadie pueda admitirlo vivimos en un mundo de apariencias en un mnundo narcisita pro para eso exist : la vida para llevala de todas lass maneras posibles que nos hagan fingir lo suficiente para sonreir=D
glo, pero entre el mundo de apariencias, no estamos nosotros?
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